Hoy os hablo de esos lugares en los que los venecianos desayunan habitualmente y que te acogen con el embriagador aroma del café
Elige un desayuno veneciano entre todos estos cafés históricos y pastelerías:
1. TORREFAZIONE CANNAREGIO
Este lugar es casi centenario, y es el único que tuesta café en el centro de Venecia, dicen que es ¡el templo del café de Venecia!. Tiene cafés de todo el mundo y no solo café, también té e infusiones de sabores, brioches, tortitas y una selección de pasteles para un perfecto desayuno.
¡El capuccino es impresionante y el olor a café de este lugar nunca se olvida!
2. CAFFÈ POGGI DAL 1919
Además de servir un excelente café, el propietario, muy amable, te deleitará con historias y anécdotas personales, y está cerca de las Galerías de la Accademia y el Museo Peggy Guggenheim.
3 DA BONIFAZIO
Muy buenos brioches, excelentes galletas. Un pequeño local con dulces típicos venecianos.
4. AMO
Un lugar de descanso gourmet en el Fondaco dei Tedeschi, a un paso de Rialto ¡muy chic!. Alta pastelería y para los amantes de lo salado, los bocadillos son buenísimos.
El café, es el de Gianni Frasi, el famoso tostador veronés del laboratorio de tostado Caffé de Giamaica.
5 MARCHINI TIME
El desayuno se toma al estilo veneciano, en la barra, aunque con la pandemia, tiene mesas altas en la calle. Me encanta el cappuccino de este lugar. El café lo puedes acompañar de una pasta o un croissant, te puedes colocar en un rincón mientras observas la vida veneciana en una de las plazas más céntricas de la ciudad: el Campo de San Luca.
6 TONOLO
Si buscas un desayuno típicamente veneciano, este es tu lugar. Las tartaletas y los pasteles en este lugar nunca defraudan, combinados además con capuchinos. Me chifla la trenza con granos de pistacho. Si llegas en la época de Carnaval, los fritole o buñuelos de Carnaval son inmejorables. También los bussolà, las galletas de la isla de Burano.
7 ROSA SALVA
Rosa Salva, simplemente es una institución, desde 1879. Tienen varias sucursales en Venecia, pero la más tradicional y especial, para mí es la de Castello, con vistas a la Scuola Grande de San Marco y a la Basilica de San Giovanni y Paolo, la conocida tradicionalmente como plaza de las Maravillas.
La historia familiar de "Rosa Salva" comienza en 1870, cuando Andrea Rosa organiza almuerzos en palacios venecianos como si fuera una "trattoria andante". Después llegó Antonio Rosa conocido como Salva, que se hace famoso como refinado pastelero. El lugar es encantadoramente romántico.
8 DAL MAS
La histórica pastelería Dal Mas es perfecta para los que buscan dulces tradicionales y para los amantes del chocolate. Cerca de la estación de Santa Lucía, es famoso por las tortas y dulces típicos de la ciudad, como el Pan del Doge, un pan dulce con frutos secos o la torta de San Marco, hecha con bizcocho y nata.
9 CAFFÉ DEL DOGE
A pocos pasos del Puente de Rialto, en una calle lateral que va a parar al Gran Canal, con sus vigas de madera vistas (barbacane), está este pequeñito café, de ambiente muy medieval.
Fue fundado en 1952 como tostadora artesanal veneciana. El nombre y su logotipo rememoran la figura del dux con su cuerno ducal en la cabeza.
10 CAFFÈ LAVENA
Un lugar clásico y refinado que ha sabido conservar la atmósfera del pasado a lo largo del tiempo, con mesas de mármol verde y sillas tapizadas de terciopelo, las mismas en las que se sentaba Wagner y otros muchos invitados ilustres.
Abrió por primera vez en 1638. Transformado en 2018, con la intervención del diseñador Philippe Stark, que remodeló los interiores con propuestas insólitas y originales. Croissants y pasteles caseros. La transformación ha sido pura magia, creando un ambiente romántico y también surrealista.
12 CAFÉ FLORIAN
No puede faltar en esta lista, el más célebre de todos los cafés, el Florian. Nació en 1720 con el nombre Alla Venezia Trionfante. Como los primeros cafés, era más una sala con simples banquetas que un salón lujoso. Tenía además, una pequeña terraza que permitía espiar la vida de la Plaza de San Marcos, que entonces era como un zoco animado con vendedores ambulantes, adivinos, albaneses, monjes, peregrinos, mendigos, músicos...
La gente viene al Caffè Florian no solo para disfrutar de una buena taza de café, sino también para vivir un momento de magia fuera del tiempo, en un lugar histórico bajo las arcadas de la Plaza San Marcos, que ya ha cumplido 300 años. Absolutamente recomendado el chocolate caliente Florian o mezclas de té exclusivas.
¿Me acompañas a tomar un desayuno a la veneciana? ☕🍰