Hoy se celebra la tradicional Fiesta de la Sensa (Sensa, es Ascensión en dialecto veneciano), una fiesta que revive la unión entre el mar y la República de Venecia: El dux con su manto dorado y rojo con cuello de armiño, su túnica azul, las medias rojas y el cuerno dogal en la cabeza, salía a su boda anual con el mar.
Pero ¿Qué se celebra? En realidad, dos hechos importantes:
1. Cuando en el año 1000 el dux Pietro II Orseolo salvó a la población de Dalmacia amenazada por los eslavos
2. Cuando en 1177, el papa Alejandro III y el emperador Federico Barbarroja firmaron en Venecia el tratado de paz que puso fin al conflicto entre el papado y el imperio, en presencia del dux Sebastiano Ziani. En esta firma el Papa entrega al Dux un anillo que representaba el poderío y dominio de los mares de la Serenissima, simbolizando el matrimonio de Venecia con el mar.
Desde entonces, cada día de la Ascensión (cada año cambia según la Semana Santa, pues se celebra 40 días después del domingo de Resurrección), el Dux a bordo del Bucintoro, una galera de dos plantas recubierta de oro, se acercaba con su séquito, hasta la isla de Santa Elena a la altura de San Pietro de Castello, para recoger al Obispo que subía con un recipiente lleno de agua bendita, un jarrón con sal y una rama de olivo que servía. como rociador.
Después se desplazaba a la desembocadura del puerto de San Nicolò en el Lido, y allí, el obispo vertía el agua bendita en el mar y después el dux lanzaba un anillo de oro a la laguna, como confirmación de la alianza entre Venecia y el mar.
El obispo y el dux desembarcaban en el Lido y se formaba una procesión religiosa que se dirigía hacia la iglesia de San Nicolò .
Ahora es el alcalde de la ciudad con el Patriarca, el que sigue con este matrimonio anual con el mar y pronuncia las famosas palabras: "Noi ti sposiamo o mare in segno di vero e perpetuo dominio": Nos casamos contigo ¡oh mar! como un signo de dominio verdadero y perpetuo. Lo hace a bordo del "Dogaressa", una góndola de desfile del Ayuntamiento de Venecia.
EL BUCINTORO
Era un palacio flotante adornado con estatuas, tallas, adornos, terciopelo rojo, oro reluciente, una de las maravillas de la ciudad desde el siglo XIII. Lo empujaban 168 remeros, ayudados por remolcadores en las maniobras más complejas. En el segundo piso, 90 asientos albergaban a los nobles venecianos.
El Bucintoro era el barco utilizado en las ceremonias: para recibir a un nuevo Dux, con motivo de la visita de un soberano o príncipe extranjero, o durante la fiesta de la Sensa.
El 9 de enero de 1798, cuando los franceses abandonaron Venecia, el barco fue destrozado por los soldados napoleónicos, pero aún podemos admirar un modelo del Bucintoro en el Museo de Historia Naval de Venecia a escala 1:10
EL MERCADO DE LA SENSA
También a partir del siglo XIV, con motivo de la fiesta de la Sensa, había un mercado en la Plaza de San Marcos. Llegaban extranjeros para comprar bienes de Oriente: sedas y cortinas y también objetos típicos venecianos, como vidrio y espejos.
En 1777 se construyó una estructura arquitectónica de planta elíptica, con estatuas coronando las cuatro entradas. En el arco interior se ubicaron 52 tiendas y en el exterior otras 50, iluminadas por la noche mediante 200 lámparas de cristal de aceite. Este precioso edificio también sufrió la misma suerte que el Bucintoro y en 1797 fue incendiado.
¿Te gustaría casarte con el mar?